ANSE DENUNCIA EL VERTIDO AL MAR Y RAMBLAS DE LA MAYORÍA DE LAS AGUAS RESIDUALES DEL ENTORNO DEL MAR MENOR.

Cartagena, 13 de agosto de 2001.

Miembros de la Asociación de Naturalistas del Sureste han denunciado durante la mañana de hoy el vertido al mar de las aguas residuales de la Depuradora Sur del Mar Menor a través del emisario submarino de Cala Reona. 7 miembros de ANSE han levantado una de las arquetas de registro junto a Cala Reona para mostrar a los medios de comunicación el elevado caudal de aguas residuales vertidas al Mediterráneo.

La Comisión Europea ha reconocido en un reciente escrito de respuesta enviado a ANSE que, efectivamente, los municipios ribereños del Mar Menor incumplen la Directiva sobre Aguas Residuales. La Comunidad Autónoma se ha visto obligada, tras las denuncias de ANSE, a declarar el Mar Menor Zona Sensible, por lo que deberá aplicar tratamientos terciarios a las aguas que actualmente se vierten en diferentes lugares.

La Depuradora Sur del Mar Menor se encuentra situada en el interior del Parque Regional de Calblanque, Monte de Las Cenizas y Peña del Aguila. Se trata de una depuradora de tipo biológico con fangos activados, que tiene capacidad para el tratamiento diario de un máximo de 50.000 m3 de agua residual generada por unos 250.000 habitantes, correspondiente a diferentes núcleos de población próximos al Mar Menor de los términos municipales de Cartagena y San Javier. Esta depuradora trata, entre otras, todas las aguas residuales procedentes de la población de La Manga. Durante el periodo estival el volumen de agua a tratar en la depuradora es muy superior al resto del año debido al aumento de población que se produce en La Manga.

La depuradora Sur del Mar Menor se puso en marcha sin contar con la mayoría de las licencias necesarias, como por ejemplo la autorización de vertido al mar, de la que sigue careciendo, a pesar de que así lo establece el artículo 57 de la Ley 22/1988, de 28 de julio, de Costas. Las obras de construcción del aliviadero conllevaron la destrucción de una importante franja del litoral sumergido de Cala Reona.

El vertido se produce debido a las filtraciones de aguas salobres hacia la red de saneamiento, y de aquí a la depuradora, que generan problemas en los procesos de depuración e impiden su reutilización debido a la presencia de altas concentraciones de cloruros que contaminarían los suelos agrícolas.

ANSE denuncia que esta no es la única depuradora que desperdicia sus aguas en el entorno del Mar Menor, sino que ocurre también lo mismo con las depuradoras de La Loma-Los Urrutias (proximidades del Algar-Cartagena) y la de Los Alcázares, ambas de lagunaje, que vierten sus aguas a las ramblas próximas, desperdiciando un recurso escasísimo y contribuyendo a aumentar la carga de nitratos y fosfatos del Mar Menor y su entorno. En el caso de la depuradora de Los Alcázares, sus aguas se unen a las procedentes de las filtraciones del Campo de Cartagena para ir a parar posteriormente al Mar Menor.

La Asociación considera intolerable especialmente el caso de la Depuradora Sur, en la que se han invertido varios miles de millones de pesetas para las obras de canalización de las aguas residuales de La Manga, estaciones de bombeo y la construcción de la misma depuradora con el fin de aprovecharlas para riego. Sin embargo, las aguas se viertan ahora cerca de un lugar de enorme fragilidad, como son las praderas submarinas de Posidonia oceánica de las costas de Calblanque. ANSE ha solicitado a la Comunidad Autónoma que tome las medidas necesarias para evitar este vertido, si es necesario mediante algún proceso de desalación.

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